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El nuevo marco laboral ofrece a las empresas diversos grados de flexibilidad antes de llegar a la opción del despido. Con el fin de los ERTE Covid a finales de marzo, se abren distintas posibilidades.

El Gobierno ha decidido aplazar hasta finales de marzo el fin a dos años de medidas extraordinarias de protección de trabajadores y empresas que supusieron los ERTE Covid. A partir de abril, las empresas en dificultades que necesiten recurrir a medidas laborales de flexibilidad deberán recurrir a las modalidades que establece la reforma laboral aprobada el pasado mes de diciembre y que son los ERTE por causas económicas, los de fuerza mayor y los que se enmarcan en el conocido como mecanismo RED. El fundamento común de todos ellos es ofrecer herramientas administrativas a las empresas que conviertan el despido en la última de las opciones para un negocio en dificultades.

El mecanismo RED es una herramienta extraordinaria para dar respuesta a problemas de sostenibilidad de una empresa, ya sea por motivos sectoriales o por circunstancias económicas generales.

Modo sectorial: Las dificultades empresariales trascienden casos particulares y afectan a todo un sector. Empresas y sindicatos elevan la petición de activar este mecanismo al Gobierno, que debe aprobarlo en Consejo de Ministros a propuesta de los ministerios de Trabajo, Economía y Seguridad Social.

Una vez aprobado, las empresas deberán solicitar un ERTE para sus empleados que las autoridades laborales deben responder en el plazo de 7 días. La solicitud debe ir acompañada de un plan de recualificación de los trabajadores afectados, un programa con el que se pretende ofrecer a esa plantilla posibilidades de colocarse en otra empresa.

Beneficiarse de esta ayuda implica comprometerse a mantener el empleo en la plantilla seis meses después de finalizada. La suspensión parcial de la jornada supone exoneraciones de cuotas por parte de las empresas que son del 60% hasta el cuarto mes y posteriormente se reducen, hasta llegar al 20%. La duración máxima de estos expedientes es de un año.

Modo cíclico: Es aplicable cuando los efectos de la coyuntura económica sobre las empresas superan a un solo sector y se generalizan. Al igual que en el sectorial, su lanzamiento es una facultad del Gobierno que después desarrollan las autoridades laborales. La reducción de jornada podrá ser de entre un 10% y un 70% y existe un compromiso de mantenimiento del empleo de seis meses con posterioridad al periodo de protección que alcanza un año tras un periodo inicial de seis meses y una prórroga similar.

Además del mecanismo RED, el nuevo marco de flexibilidad establece dos herramientas derivadas del actual, los ERTE ETOP y los ERTE por fuerza mayor.

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Fuente: El Mundo

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