Desde 2015, las empresas en España han intensificado sus esfuerzos para incorporar los ODS, reconociendo la sostenibilidad como un factor clave para su competitividad, innovación y resiliencia en el mercado.
La integración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 en las estrategias de las empresas españolas ha experimentado una evolución significativa en los últimos años. Desde la adopción de los ODS por las Naciones Unidas en 2015, las compañías en España han intensificado sus esfuerzos por incorporar estos Objetivos en sus prácticas. Todo ello para adaptarse a un entorno donde la sostenibilidad se ha convertido en un factor determinante para la competitividad, la innovación y la resiliencia empresarial.
En este artículo, exploraremos cómo las empresas españolas han adoptado y avanzado en la integración de los ODS en sus estrategias, acciones y medidas, además de cuáles son los ODS más trabajados y los desafíos del futuro a través de nuestro último informe Implantación de la Agenda 2030 en las empresas españolas. Resultados de la consulta de desarrollo sostenible 2024.
1. Crecimiento en el compromiso empresarial con los ODS.
Hoy en día, los ODS son una imagen familiar en el entorno corporativo: los vemos en campañas publicitarias de grandes marcas, en iniciativas de sensibilización dirigidas a las plantillas y en informes de sostenibilidad que reflejan el compromiso de las empresas. Sin embargo, este nivel de visibilidad y adopción no siempre fue así; ha sido el resultado de un notable proceso de transformación dentro del tejido empresarial español.
Mientras que en 2018 el 69% de las empresas españolas afirmaban conocer los ODS, según el informe de 2024, esa cifra ha escalado hasta el 88%. Esto las ha llevado también a aumentar su compromiso con los ODS y la sostenibilidad empresarial mediante el establecimiento de compromisos cuantificables. En concreto, este indicador pasó del 13% en 2018 al 21% en 2020, mejorando notablemente. Sin embargo, 4 años después sigue estancado en torno al 20%, lo que resalta la necesidad de reforzar este aspecto.
En contraste, un mayor compromiso en la fijación de objetivos se observa en las empresas participantes del Pacto Mundial de la ONU España. En particular, el 35% de estas organizaciones ha establecido objetivos medibles en relación con los ODS, superando la media nacional.
2. Avances en la integración de los ODS en las empresas españolas.
Más allá del compromiso, ¿realmente se ha avanzado en la integración de los ODS en las empresas en estos años? La respuesta es afirmativa, aunque con matices. El porcentaje de empresas que lleva a cabo acciones que contribuyen a los ODS ha pasado del 86% en 2020 al 90% en 2024. Y si nos centramos en las empresas cotizadas,el cambio es aún más evidente. Según el informe «ODS, Año 8: Rentabilidad Económica y Agenda 2030«, en 2016, solo el 32% de estas compañías estaban trabajando activamente en la implementación de los ODS, con un promedio de apenas 2,7 objetivos por organización. Para 2021, ese porcentaje ya había subido al 85%, con una media de 9,1 ODS por empresa. Este salto refleja un mayor compromiso, impulsado por la conciencia de que integrar los ODS no solo mejora la reputación, sino que también fortalece la resiliencia y competitividad de las empresas en un mercado cada vez más orientado hacia la sostenibilidad.
Volviendo a los datos de las empresas españolas a nivel general, los datos de la Consulta empresarial en ODS 2024 indican que la incorporación de los ODS en las diferentes áreas y departamentos de las empresas españolas ha crecido significativamente, pasando del 22,8% en 2020 al 36% en 2024. No obstante, el número de empresas que han desarrollado una estrategia de sostenibilidad alineada con los ODS se ha mantenido en torno al 30% desde 2022, lo que sugiere que, aunque hay avances, aún queda un largo camino por recorrer para alcanzar una integración plena y efectiva.
3. Evolución de los ODS más trabajados por las empresas.
Entre 2018 y 2024, las empresas españolas han mostrado un enfoque claro en ciertos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), reflejando tanto las prioridades del sector empresarial como las demandas sociales. A lo largo de estos años, algunos ODS se han consolidado como temas clave, mientras que otros han ganado o perdido protagonismo. ¡Hagamos un repaso por los más relevantes!
En primer lugar, el ODS 5 sobre igualdad de género ha sido, de manera constante, el objetivo más trabajado, lo que demuestra una fuerte preocupación por promover entornos laborales inclusivos y justos. Este enfoque se debe en parte a la presión social y regulatoria para eliminar las brechas de género y promover el liderazgo femenino, consolidándose como un aspecto esencial en las agendas de sostenibilidad empresarial.
Por otro lado, el ODS 3: salud y bienestar, que en 2018 y 2020 ocupaba la segunda posición, ha caído hasta el quinto lugar en 2024. A pesar de ello, siguen creciendo el número de empresas que cuenta con programas para promover la salud y bienestar dentro de la plantilla (37% en 2020 VS 50% en 2024).
A partir de 2022, otros ODS como el ODS 7: energía asequible y no contaminante y el ODS 8 Trabajo decente y crecimiento económico han cobrado mayor relevancia, reflejando una urgencia creciente por la transición energética y la mejora de las condiciones laborales. Por su parte, el ODS 13: Acción por el Clima también ha ganado protagonismo, alineándose con la necesidad urgente de mitigar los efectos de la crisis climática.
En definitiva, la evolución de los ODS más trabajados demuestra cómo las empresas se están adaptando continuamente a los cambios globales y locales, ajustándose a los desafíos emergentes.
4. Desafíos persistentes y oportunidades futuras de los ODS para las empresas.
Con estos datos, es imposible negar que la tendencia hacia una economía más sostenible es una realidad constante. Sin embargo, las empresas aún cuentan con grandes retos como el establecimiento de compromisos cuantificables con límites de tiempo, la mejora de la medición del impacto y la transparencia en la comunicación de los avances.
En este aspecto, la implementación de normativas como la Directiva sobre información corporativa en materia de sostenibilidad (CSRD) y la Directiva sobre diligencia debida de las empresas (CSDDD) podría impulsar un cambio positivo en esta área, mejorando la transparencia y la credibilidad de las empresas en sus esfuerzos por alcanzar los ODS.
Además, las acciones de formación y sensibilización son cruciales para la evolución. Por ello desde el Pacto Mundial de la ONU España ponemos a disposición de empresas y público general nuestra la plataforma online en abierto para la formación en sostenibilidad empresarial; Open Academy Spain.
Por último, las entidades ya adheridas al Pacto Mundial de la ONU, pueden aumentar su ambición uniéndose a la iniciativa Forward Faster. Una llamada a las empresas para que aceleren su contribución a los ODS a través de cinco áreas prioritarias. Y es que, a falta de seis años para cumplir con la Agenda 2030, sólo el 17% de las 169 metas que contienen los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 están en camino de conseguirse. Esta iniciativa representa una oportunidad para que las empresas españolas lideren el cambio hacia un modelo económico más sostenible, estableciendo compromisos más ambiciosos y midiendo su progreso con mayor rigor.
Fuente: IIILA LEY. Consejo General de Economistas. REAF Asesores Fiscales.