Cada vez son más las empresas que cuentan con equipos de trabajo híbridos, que combinan empleados fijos internos y colaboradores autónomos externos. ¿Cuáles son las ventajas?
Las empresas se están dando cuenta de que las fórmulas tradicionales de contratación cada vez se ajustan peor a sus necesidades y a las características del actual mercado laboral. Ante tal situación, emerge un nuevo modelo, basado en equipos de trabajo híbridos.
Se trata de un modelo que combina perfiles internos y externos, que se unen a proyectos concretos y que no forman parte de la estructura empresarial. En realidad, no es más que la evolución de un modelo que existe desde hace mucho tiempo, ya que las compañías llevan años contando con el apoyo de consultores externos. Pero ahora se ha perfeccionado, afinando el encaje de su experiencia y conocimiento con la cultural y los valores de las empresas.
“Los profesionales externos son parte de la empresa durante los meses de duración del proyecto gracias, en parte, a la evolución de las herramientas de comunicación y del trabajo en remoto, que permite generar relaciones que no necesariamente se den en un espacio-tiempo concreto”, explica Shakers, plataforma de contratación de freelancers, de la que ya hemos hablado en alguna ocasión.
Ventajas de los equipos de trabajo híbridos.
La configuración de equipos de trabajo híbridos tiene interesantes ventajas para las empresas. Éstas son algunas de ellas.
Alto impacto.
Shakers señala que se suele echar mano de equipos de trabajo híbridos para el desarrollo de proyectos que tengan potencial de generar un crecimiento significativo, como sucede en el caso de startups, o que puedan dar lugar a un cambio positivo o estratégico en el seno de grandes corporaciones.
“Entre los ámbitos con mayor demanda se encuentran proyectos de desarrollo de productos, integración de la IA y growth marketing, entre otros”, especifica la compañía.
Fuente: Emprendedores