El tipo aplicado a las empresas bajará cinco puntos hasta 2027 y quedará en el 20%.
La deducción propuesta por los catalanes se aplica por la reinversión de beneficios.
También evitan una subida discal a 2,7 millones de mutualistas en Cataluña.
Las pymes acaparan protagonismo en la inesperada reforma fiscal que el Gobierno ha planteado, aprovechando las enmiendas planteadas esta semana sobre los impuestos extraordinarios a bancos y energéticas. En concreto, las enmiendas de Junts también se han alejado del foco de la gran empresa, el mantenimiento de la tasa sobre la banca o el fin del impuestazo a las energéticas, y proponen un paquete fiscal para beneficiar a las pymes y microempresas. Rebajará progresivamente el impuesto de Sociedades hasta 2027, aplicando un tipo del 17% en el primer tramo de 50.000 euros a las micropymes y un 20% con carácter general. También propone una deducción de hasta el 30% que premia a aquellas pymes que generan puestos de trabajo y aumenten su tamaño.
Conscientes de que el tejido empresarial catalán, y del país, está formado mayoritariamente por las pymes, desde Junts valoran a su iniciativa como una apuesta para preservar la actividad empresarial en la región, según ha podido saber elEconomista.es. Supondrá un ahorro de 9.500 millones a nivel nacional –2.500 millones en Cataluña– para las empresas que facturan hasta 10 millones de euros.
Desde la patronal del sector a nivel estatal, Cepyme, están valorando el alcance de las medidas propuestas en el paquete de enmiendas. En Cataluña, el presidente de organización empresarial Pimec, Antoni Cañete, mostró su agradecimiento a Junts por hacer realidad una reclamación histórica.
Fuente: El Economista